En el mundo se están conjuntando esfuerzos para desarrollar nuevos materiales plásticos.
Los materiales Oxo-Degradables tienen un tiempo de vida de aproximadamente 24 meses en lugar de años, ya que se ha encontrado que algunas bolsas de plástico sintético como el estireno pueden tardar de 300 hasta 500 años en desintegrarse.
Estos plásticos Oxo-Degradables pueden ser programados desde su formulación durante el proceso de fabricación para tener una vida útil controlada, durante la cual funcionarán de la misma forma que los elaborados a base de plástico convencional, serán igual de fuertes, flexibles, ligeros e impermeables. Sin embargo, si desafortunadamente terminan descartados en un ambiente abierto, como el mar o la tierra, se podrán degradar y finalmente biodegradar en un tiempo mucho menor, sin dejar rastros dañinos para el medio ambiente.